Después de 50 días de confinamiento por fin hemos podido salir de nuevo a practicar nuestro deporte preferido.
Durante todos estos días, hemos tratado de ejercitarnos de alguna manera tratando de mantener el cuerpo activo y la mente distraída. Algunos habréis hecho ejercicios de fuerza, algún HIT, y los más afortunados habréis podido montar la bici en el rodillo e incluso correr en cinta.
En cualquier caso, después de este periodo de inactividad es necesario una vuelta progresiva a los entrenamientos. Tener presente, que la gran mayoría no habéis podido realizar trabajo de resistencia aeróbico, pilar sobre el que sustenta nuestra deporte. Del mismo modo, nuestro trabajo ha sido sin impacto, por los que nuestras articulaciones a la hora de volver a los entrenamientos han de ser mimadas especialmente.
Es momento de replantear la temporada.
Hay que iniciarse con un período de adaptación en el que se incluyan ejercicios de adaptación funcional para todo el cuerpo, un trabajo aérobico, que vaya aumentando de manera progresiva para ir alcanzando cuotas de volumen que nos sirvan de base para el trabajo posterior. Y todo esto acompañado de ejercicios de movilidad articular y estiramientos que ayuden a cuidar nuestro cuerpo.
No hay que dejarse llevar por el furor en la vuelta a la práctica deportiva. Seamos pacientes, no tengamos prisa y poco a poco volveremos a alcanzar nuestro estado de forma sin lesionarnos. Disfrutemos mientras corremos y comencemos a pensar en nuevos retos, ojalá que para este 2020.